En el departamento del Vaupés existe una gran diversidad étnica, gastronómica y biológica, esto ha permitido que se pueda ofertar una amplia gama de productos, entre ellos sus artesanías, las cuales se hacen cada vez más conocidas en el país y fuera de él. Las artesanías surgen de modificaciones estéticas de utensilios de uso diario tales como vasijas, tinajas, platos y pocillos de barro, canastos, balayes, matafríos, coladores y sombrero, y son también representaciones del ambiente que rodea al indígena como los animales, los instrumentos propios de rituales como aretes, manillas, collares, carrizos o instrumentos de caza como la cerbatana, el arco y la flecha.

Las características de las artesanías del Vaupés

Las artesanías no solo representan el territorio sino las creencias y tradiciones de los pueblos  indígenas del Vaupés. Ancestralmente, cada grupo étnico recibió de los dioses algunos instrumentos y materias primas para cumplir con sus necesidades básicas. El barro es uno de ellos. Este material es usado tradicionalmente por el grupo étnico Bará, pero con el movimiento de los grupos de un territorio a otro, el barro es trabajado por varios grupos como los Cubeos y Curripacos.

El waruma o guarumá es otra materia prima natural de la cual se extraen fibras para fabricar los utensilios donde se procesan la fariña y el casabe de yuca, principal alimento de los pobladores de la zona. Estas materias primas son usadas por los hombres, los cuales deben proporcionar a las mujeres estas herramientas al formar una familia: los padres enseñan a los hijos todo el proceso una vez llegan a la adolescencia. Este material es utilizado generalmente por el grupo de los Curripacos quienes impregnan en sus tejidos representaciones de palmas, jaguares, peces, entre otros.

Los canastos son herramientas diseñadas ancestralmente por las indígenas Cacuas quienes culturalmente tejían para otros grupos. Éstos representan el quehacer de la mujer indígena chagrera, que va todos los días a su parcela a cuidar de la yuca, pina, cacao y ají. En cuanto a los accesorios que se fabrican, han venido variando en el tiempo debido a que años atrás se fabricaban con semillas que emitieran sonidos a través de las danzas y materiales que permitieran su resistencia como las fibras naturales.

A los accesorios se le agregan plumas de aves como las guacamayas para hacerlos más coloridos y vistosos